Translate

domingo, 1 de septiembre de 2013

Pesto genovés





¡Hola!
Tras más de un mes sin escribir nada, vuelvo con nuevas recetas y aprovecho que aún hace calor para proponeos platos frescos. Voy a empezar con el pesto genovés porque me lo pidió mi prima Luján hace ya algún tiempo y es una receta en la que su principal ingrediente, la albahaca, que en italiano se llama basilico, vive su mejor momento en verano.

Aunque hay muchos tipos de pestos, el genovés es el más famoso. Su ingrediente principal es la albahaca, sobre todo la de Prá, a las afueras de Génova y como todos los platos tradicionales, las recetas son muy variadas.
Los ingredientes clásicos son, además de la albahaca, los piñones, el ajo, el queso parmigiano o el pecorino (queso de oveja), aceite virgen de oliva y sal. La tradición dice que hay que mezclarlo todo en el pestino, el mortero, y de ahí la palabra pesto, pero se puede hacer muy bien con el minipimer o en  una batidora de vaso.
Si usais el mortero, este tiene que ser de mármol ya que los de madera absorben demasiado el aceite. Primero se mezcla la sal. los ajos y los piñones. Cuando están un poco dehechos, se añaden las hojas de albahaca y se machacan girando con el mortero. Luego se añade el queso rallado y se mezcla todo con el aceite.
 Si usais la batidora solo teneis que mezclarlo todo hasta que esté hecha una pasta de color verde. Hay que meter el vaso unos minutos en el congelador para que este frio y la albahaca no se oxide durante la preparación a causa del calor de la batidora.

Para hacer pesto para 3/4 personas utilicé unas 10 hojas grandes de albahaca, un diente de ajo,  unos 60 gr de piñones y 3 cucharadas de queso rallado además de un chorro de aceite.

El pesto acompaña cualquier tipo de pasta, desde unos espaguetis hasta la pasta corta, sobre todo si es fresca, y es una de las preparaciones más fáciles de hacer. Podeis usar el pesto comercial y de ellos el mejor, para mi gusto, es el de Buitoni. Es fresco y se conserva en la nevera. Si quereis un pesto que podeis tener de reserva, tambien es bueno el que comercializa Star con la marca Tigullio. Viene en un frasco de cristal y aunque dice que son 4 raciones, se puede utilizar para 5.

Mientras coceis la pasta, en una fuente honda meted el pesto. A mitad coción de la pasta, tomad un poco de agua de la pasta con un cucharón y diluir el pesto. Cuando la pasta está cocida, la escurris y la mezclais con el pesto diluido.¡Solo teneis que añadir mucho queso parmigiano del bueno!


viernes, 5 de julio de 2013

A la Italiana: Gateau a la Napolitana

A la Italiana: Gateau a la Napolitana: Este plato, de clara influencia francesa, es hoy uno de los más característicos de la cocina napolitana donde se adaptó utilizando ingr...

Gateau a la Napolitana


Este plato, de clara influencia francesa, es hoy uno de los más característicos de la cocina napolitana donde se adaptó utilizando ingredientes tipicamente italianos como la mortadela y la mozzarella. Es, sobre todo barato y fácil de hacer ya que lo podemos dejar preparado previamente y meterlo en el horno en el último momento. Incluso podemos hornerarlo y calentarlo más tarde en el microondas. 
En mi casa se hacía con carne picada y tomate o con bonito y tomate, pero aquí os traigo la receta napolitana. Si no encontrais mozzarella podeis usar un queso parecido, de pasta blanda. Yo en este caso no use mozzarella sino "scamorza", un queso italiano con más consistencia que la mozzarella y que da mucho sabor.

Ingredientes para cuatro personas:
- 6 patatas medianas
- 250 gr de queso
- 300 gr de mortadela de Bologna cortada gruesa
- Un huevo
- Leche
- Sal, pimienta, nuez moscada y queso rayado para gratinar

Primero se cuecen las patatas y se hace un pure al que se añade un poco de leche y la clara de un huevo batida a punto de nieve. Se sala y se le añade la pimienta y un poco de nuez moscada. La yema se reserva.

Se cortan el queso y la mortadela en trozos. En una fuente de horno se pone la mitad del puré de patatas. Encima se van poniendo las lonchas de queso y mortadela.





Se cubre con el resto del puré y se pinta con la yema batida y con queso rayado. Se mete en el horno a gratinar a 200º durante 20 minutos, más o menos. Cuando veais que tiene un bonito color dorado, lo podeis sacar.





¡Dejadlo enfriar un poco antes de servirlo sino quereis que alguien se queme la boca!




lunes, 17 de junio de 2013

Ensalada fresca de pasta

Este año ha tardado pero al final ya ha llegado el calor, por lo menos a Roma. Y cuando llegan las altas temperaturas, nada mejor que preparar platos frescos y rápidos. Aquí os traigo hoy una ensalada de pasta que podeis preparar el día anterior y mantenere en la nevera. También es ideal para llevar a la playa en un "taper" o para comer en la oficina.
Esta es la versión vegetariana pero el tofu se puede sustituir por queso, mejor mozarella pero a falta de esta, puede servir un queso fresco aunque con consistencia.

Ingredientes:
- 300 gr de pasta corta. Yo uso mucho las "penne corte" o plumas en su formato más pequeño
- 10 tomates cereza
- Una confección de tofu o de queso fresco tipo mozarella
- Aceitunas
- Unas hojas de rúcola

Mientras se cuece la pasta en abundante agua con sal, picad el tomate, la rúcola, las aceitunas y el tofu y lo poneis en una ensaladera.

La pasta tiene que cocer algún minuto más del indicado en la confección ya que hay que enfriarla con agua y  así se endurece un poco.  
Cuando esta fría se une a los ingredientes de la ensaladera y se riega con unchorro de aceite. ¡Y lista para comer!

  

sábado, 25 de mayo de 2013

Tortiglione con verduras



Estando ya a finales de mayo habría preferido realizar una receta más veraniega como puede ser una ensalada pero el día hoy es desagradable y frío y por eso elegí un plato más acorde con las bajas temperaturas.
El formato de pasta es el "tortiglione", en forma de tubos con estrías. Es una pasta corta que recoge muy bien las salsas consistentes como esta que os presento.

Ingredientes para seis personas:
- Medio kilo de pasta (un paquete)
- Dos zanahorias
- Un calabacín mediano
- Media berenjena
- Un pimiento rojo
- Un bote de tomate natural
- Aceite de oliva
- Sal, pimienta y orégano
- Medio vaso de agua
- Queso parmigiano rallado

En una sartén con un poco de aceite puse a dorar la zanahoria y el calabacín cortados en trocitos. Después añadí la berenjena también en trozos, y más tarde el medio pimiento. Cuando estaba dorados y crujientes, eché el tomate, la sal, la pimienta y el orégano. Para que no quedara muy denso, añadí el medio vaso de agua y lo dejé todo a cocer tapado a fuego lento unos 15 minutos.

Mientras en una olla grande puse a calentar el agua con sal gorda. Cuando empezó a hervir, eché la pasta y la dejé cocer, revolviéndola de vez en cuando, los 11 minutos que decía el paquete. Una vez "al dente", la escurrí y la pasé a la fuente en que la iba a servir añadiéndole un chorrito de aceite y la salsa de la sartén. El queso se lo añadió cada uno en su plato.

Un consejo para quienes tienen niños a los que no les gustan las verduras. Cuando la salsa está ya casi preparada, la pasáis por la minipimer y la servís  sobre la pasta. Así les hacía yo de pequeños a Matteo (¡hoy ventaríano!) y a Laura que no querían ni ver la berenjena. La salsa queda de un bonito color naranja y si les decís que solo es de tomate, ¡seguro que se lo creen!


domingo, 5 de mayo de 2013

Ravioli burro e salvia

Esta receta se puede hacer con raviolis o con tortellini, no cambia el resultado porque cualquier pasta rellena va bien. Yo utilicé raviolis frescos rellenos de carne porque había ido a Eataly (http://www.eataly.it/) con Roberto y nos paramos en la pasta fresca. La elección era dificil porque tienen muchísima variedad de rellenos. Elegimos los raviolis de carne.
Para los no italianos, una pequeña lección de pasta rellena. Es un tipo de pasta de huevo típica del centro norte de Italia, sobre todo de la llanura Padana, en torno a la ciudad de Bolonia, que la hizo mundialmente famosa. Cada forma tiene un nombre distinto y también los rellenos pueden variar.
Una de las más famosas es el tortellino de Bolonia, con su forma redonda característica. Aunque el clásico es de jamón o de carne asada, puede hacer de muchos rellenos como ricotta y espinacas o setas. Hay tortellini comerciales muy buenos y seguro que no os será dificil encontar en los supermercados los de marcas italianas como Rana (mi preferido), Buittoni o Fini. Si vais a Bolonia, os aconsejo pasar por Tamburini (Via Caprarie 1) (http://www.tamburini.com/) y gastar un poco de dinero en unos excelentes tortellini.
El raviolo es un cuadrado de pasta fresca relleno. Está muy difundido por toda Italia y el relleno puede ser salado o dulce.
Como estos son de carne, elegí una salsa sencilla como es el Burro e Salvia (Mantequilla y salvia). Para cuatro  personas compré 500 gr. Cocerlos es fácil: se calienta agua con sal en una tartera bastante honda y cuando empieza a hervir, se echa la pasta. Para saber cuando está cocida, basta esperar a que empiecen a subir a la superficie. En ese momento se escurren.
En una fuente resistente al fuego,  se derrite la mantequilla (80-100 gr). Se añade abundante salvia y los ravioli. Se revuelve todo y se sirve con queso rallado. Fácil de hacer y muy rápido, sobre todo con la pasta comercial. No os lleva más de 10 minutos y es un plato completo.

Un consejo, si no quereis engordar, sustituir la mantequilla por margarina. El sabor no es tan bueno pero os gustará igual

jueves, 25 de abril de 2013

A la Italiana: Ensalada de tofu

A la Italiana: Ensalada de tofu: Hoy os voy a dar una receta que es rápida de hacer y estupenda para las jornadas de calor del verano. Es una ensalada de tofu. El tofu ...

Ensalada de tofu


Hoy os voy a dar una receta que es rápida de hacer y estupenda para las jornadas de calor del verano. Es una ensalada de tofu.
El tofu también es conocido como queso de soja ya que se fabrica coagulando la leche de soja. Es un alimento ideal para quien no puede tomar leche de vaca o para quien quiere hacer dieta ya que es bajo en calorías y en contenido graso pero tiene muchas proteínas.
Su sabor es un tanto insípido por lo que va muy bien con sabores fuertes y tiene como característica el que los absorbe, sobre todo de las especias a las que acompaña. Aunque lo inventaron los chinos, la cocina japonesa lo usa mucho y también otras cocinas orientales. El tofu viene envasado al vacío en bloques cuadrados y solo hay que cortarlo en cuadrados más o menos grandes según la receta que queramos realizar. Puede sustituir muy bien a la carne o al queso en muchos platos. Si no se consume todo, se puede conservar un par de días en una caja de plástico con un poco de agua.  

En la foto aparece la ensalada que hice hace unos días ya que venía a comer Matteo, el vegano. Es muy fácil de preparar. Los ingredientes son: tofu, tomate, rúcula, aceitunas, alcaparras (encurtidas) y albahaca. Después la aliñé con una vinagreta hecha con aceite, salsa de soja, sal y limón.

Ya solo queda desearos buon appetito!




sábado, 6 de abril de 2013

Cuscus a la italiana



Hoy he querido preparar algo original y en apariencia menos italiano, el cuscus, esta vez de carne y preparado en el tajiné. El cuscus también es un plato que se cocina en Italia, sobre todo en la zona oeste de Sicilia donde los contactos con en norte de África siempre han sido estrechos. Cada mes de septiembre, en un pueblo que se llama San Vito lo Capo, se celebra un festival del cuscus que atrae a cocineros de ambos lados del mediterráneo. El típico cuscus de Trápani se prepara con un caldo de diversos pescados de la zona.
Este que hice hoy se lo dedico a mi tia Amina, que para eso es marroquí...!







Os doy mi receta que es muy sencilla y sana. Las cantidades son para tres personas:
- 250 gr carne de ternera en trozos
- 2 zanahorias
- 1 cebolla
- 1 pimiento rojo
- 4/5 tomates cereza
- aceitunas
- Especias: azafrán, comino, jengibre, sal y pimienta
- 210 gr de cuscus
- aceite
- agua

Primero preparé en el tajiné la carne con las verduras. El truco del tajiné en su cocción lenta, se mete todo en él y se deja a fuego lento, sin prisa, como en Marruecos.
En un poco de aceite primero doré la carne durante unos minutos. Cuando ya consiguió un color bonito, empecé a colocar la verdura en estratos: de las más duras a las más tiernas.



Así que empecé por las zanahorias, después una capa de cebolla y otra de pimiento, para terminar con los tomates. En medio litro de agua caliente diluí las especias: el azafrán, el comino, el jengibre, la sal y la pimienta y lo añadí al tajiné. Lo cubrí con su característica tapa en forma de cono, y lo dejé como una hora, a fuego lento. No hay que tocarlo, solo controlar de vez en cuando hasta ver que las verduras están blandas. Entonces añadí las aceitunas.




Ahora solo quedaba preparar el cuscus. Yo uso uno precocinado que se
hace en 5 minutos. Hay que calcular 70 gramos por persona. Se pone en una cazuela con una cucharada de aceite por persona. Mientras se calienta el agua: 100 ml por persona, y se sala. Se vierte sobre el cuscus, se tapa y se deja 5 minutos. Cuando se levanta la tapa se ve que el cuscus ha crecido y con un tenedor se desgrana.
En este caso lo serví separado ya que el tajiné se lleva a la mesa pero cuando cocino con tarteras normales, lo sirvo con la carne o verdura encima. La salsa tiene que quedar con bastante líquido para que, mezclada con el cuscus, este no quede seco.


jueves, 28 de marzo de 2013

Spaghetti all'amatriciana

Os voy a dar la receta de uno de los platos más típicos de la cocina romana. Seguramente los puristas dirán que si el tomate, que si la panceta, pero a mí no me importa porque seguramente en Amatrice, el pueblo del que son originarios, son maravillosos pero no todos tenemos "guanciale" (un tipo de tocino) o tomates de San Marciano. Se pueden hacer también con "bucatini", unos espaguetis agujereados.


Calcular la pasta es fácil: unos 80 gr. por persona es lo que se come normalmente. Si uno es muy comilón, calcular 100 gr. Yo lo preparé el otro día para tres y con 250 gr (medio paquete) comimos abundantemente. De panceta usé 100 gr. Era un trozo alargado que corté en pedacitos. También usé una lata de tomate en trozos, sal, pimienta, chile, albahaca y queso de oveja rallado (pecorino).
En una tartera grande puse a calentar el agua con sal. Cuando rompió a hervir eché la pasta.  Los espaguetis hay que irlos girando poco a poco para que se vayan humedeciendo y entrando en la tartera.
Mientras la pasta cocía, unos 12 minutos o lo que indique el paquete, preparé la salsa.


En una sartén con poco aceite puse a dorar la panceta. Cuando tomó color añadí el tomate, un poco de sal, (poca porque la panceta ya es salada), la pimienta  y la albahaca.También añadí una puntita de chile troceado para que le de un toque picante. La salsa hay que dejarla cocer un poco.
Cuando la pasta estuvo cocida, la escurrí y la mezclé con la salsa. Lo mejor es juntarla en la satrtén y "mantecarla" a fuego bajo. Una vez mezclada la pasé a la fuente de servir con un poco de queso mezclándolo todo bien. Se sirve con más queso.
Es un plato único, fácil de preparar y como dice mi hija "potente".

sábado, 9 de marzo de 2013

Un bizcocho de chocolate vegano

Como hoy hice un bizcocho de chocolate, os voy a contar alguna cosilla del chocolate que se puede encontar en Italia. Primera cosa: olvidaos de la Nutella, de los Bacci Perugina y de los Ferrero Rocher.
La ciudad del chocolate por excelencia es Turín donde además de hacer coches, hacen maravillosos chocolates. En la capital del Piamonte se celebra todos los años una fiesta del chocolate, Cioccolatò, que hasta el pasado año era en marzo pero ahora ha pasado al mes de noviembre.
Si vais a Turín no dejeis de probar el Bicerín, una bebida caliente a base de café, cacao y crema de leche. ¡Deliciosa! En cuanto a bombones, hay de todo: cortados, pralinas, tartufos, pero la especialidad es el gianduiotto, un bombón con crema de avellana del Piemonte.
Venchi es una de las marcas más antiguas ya que se fundó en 1878. Desde hace unos años también hacen helados artesanos con diversos gustos de chocolate y han abierto heladerías en varias ciudades italians y extranjeras. En plena plaza Castello está el famosísimo café Baratti & Milano donde merece entrar a echar un ojo aunque solo sea para ver el magnífico local recientemente restaurado. Los que saben de chocolate dicen que el mejor es el de Guido Gobino, en via Giuseppe Luigi Lagrange, a dos pasos de plaza San Carlo. El único problema es elegir el chocolate porque allí se pierde el gusto: hay de todo y cada uno es mejor que el otro. Os recomiendo una bolsita con una selección de las distintas variedades: gianduioti, cremini (cortados), ganaches y cialdine de diversos gustos. Cuesta un poco pero merece la pena.
Mi dulce de hoy es además vegano, es decir que está hecho sin huevo y sin leche porque venía a comer Matteo que como no come nada que sea de origen animal en su dieta están descartados los huevos, la leche y hasta la miel. Siempre fue un problema hacer un postre para él hasta que encontré esta receta que luego yo cambié un poco. Es muy fácil y se basa en la del famoso bizcocho del yogurt.
Ingredientes: un vaso de yogur de soja (el mio era de 400 gr.), el mismo vaso de azúcar, dos vasos de harina, medio vaso de cacao amargo, medio vaso de maizena, medio vaso de leche de soja, medio vaso de aceite, un sobre de levadura y pepitas de chocolate. Para el molde: margarina vegetal y un poco de harina.
En un bol mezclamos con la batidora todos los ingrediente menos las pepitas de chocolate que luego añadimos tras haberlas pasado por un poco de harina para que no se vayan al fondo. Untamos el molde con margarina y harina y vertimos la mezcla en el. Lo metemos en el horno a 180º durante 35/40 minutos. Estará bien cocido cuando pinchándo con una aguja de calcetar, esta salga limpia. Lo desmoldamos y lo dejamos enfriar. Cuando está frío lo podemos decor con azúzar en polvo. También lo podemos abrir por la mitad y untarlo con una capa de crema de chocolate (¡sin leche!)
Es muy fácil y os garantizo que queda jugoso y es muy rico. Y seguramente tiene menos calorías que un bizcocho normal...!
¡Ah! La fotos son de la fotógrafa de la familia: Laura.

martes, 5 de marzo de 2013

Luto en Nápoles

Hoy es un día muy triste para Nápoles. Esta noche ardió una de sus joyas, un símbolo del renacimiento de la ciudad, la Ciudad de las Ciencias. Un estupendo museo interactivo que se había construido en lo que fueron unos altos hornos. Muy cerquita del mar y en una zona degradada, había surgido una pequeña maravilla. Miles de personas, sobre todo estudiantes, lo visitaban cada año.
Os traduzo lo que escribe Roberto Saviano: Aún no sabemos si se trata de un incendio provocado pero Bagnoli (es el barrio) ha estado siempre en la mira de los clanes que, frente al mar, querrían edificar casas... El fuego que destruye la Ciudad de la Ciencia confirma el fracaso de imaginar una Bagnoli distinta. Una Nápoles distinta. 
Ancora non sappiamo se si tratta di incendio doloso, ma Bagnoli da sempre è nelle mire dei clan che lì - fronte mare - vorrebbero edificare condomini... Il fuoco che distrugge Città della scienza suggella il fallimento di immaginare una Bagnoli diversa. Una Napoli diversa.


 Así era el Museo
Así ha quedado

¡Qué tristeza!

sábado, 2 de marzo de 2013

Hola a todos

HOLA A TODOS

Esta mañana, tras haber realizado una maravillosa quiche de calabacines, pedí a mi hija Laura que la fotografiara para guardarla como recuerdo. Mientras hacía las fotos, me dio la idea: Mamá, ¿por qué no haces un blog de cocina italiana y vegana? Y ahí nació este blog. 
He descubierto que me gusta cocinar, sobre todo los sábados y domingos que tengo tiempo. Desde que estoy en Italia, y ya van para 17 años, he aprendido muchas cosas, sobre todo de cocina vegetariana y vegana gracias a Matteo, mi hijastro. 
Los veganos no comen nada que tenga origen animal por lo que han eliminado de su dieta tanto los huevos como la leche y sus derivados. Al principio, cuando hace unos 6 años, decidió seguir este tipo de alimnetación fue un shock para toda la familia, sobre todo para mi. Más tarde y poco a poco, he aprendido a hacer muchas cosas y cuando comemos todos juntos siempre hay un plato con tofu o seitan o soja. ¡Hasta hice un curso de cocina vegana!

El plato de hoy no era vegano, era simplemente vegetariano. Es una quiche de calabacines que os voy a explicar:

Ingredientes: Una masa quebrada redonda ya preparada (la de Carrefur es muy buena), 600 gr. de calabacines, tres huevos, 1 vaso (250 gr.) de ricotta o un queso blando tipo Philadelphia. 1 vaso de nata de cocina, queso rallado (mejor de cabra), sal y pimienta.
En un bol bate los huevos, añade la ricotta y la nata. Mientras en la batidora pica los calabacines hasta que queden en trozos muy pequeños, añadelos a los huevos y el queso y mezclalo todo bien con el queso rallado, la sal y la pimienta.
Mientras tanto calienta el horno a 180º y pon la masa en el molde pinchándola un poco. Vierte el compuesto y espolvoréalo con más queso rallado. Si tienes un queso blando puedes poner unos trocito encima. Mételo al horno a 180º durante media hora. Cuando esté dorado sacalo y déjalo enfiar. Dentro tiene que quedar jugoso. 

Bueno, pues esta es mi primera receta y espero que os guste